Era domingo y era 13 y mamá estaba re nerviosa porque era el encuentro de el interpretador y quería ir, pero no sabía porque papá también iba a ir y se iban a encontrar y no quieren verse mucho, nada más cuando papá me viene a buscar a casa para llevarme a algún lado o me trae o algo así. A eso de las cinco y media papá me vino a buscar, mamá bajó conmigo y yo tenía miedo de que empiecen a pelear pero papá le preguntó si quería venir con nosotros y yo no sabía si pensar que era mejor o que no, pero mamá dijo que sí, que esperemos porque tenía que subir a buscar la cartera y subió, bajó y nos fuimos los tres a San Telmo que es un barrio que conocí cuando todavía vivíamos en Bahía todos juntos y veníamos de vacaciones a Buenos Aires.
Al principio no había mucha gente, eran todos grandes, no muy viejos pero grandes. Después llegaron unos viejos porque había uno que iba a leer poesías. A mí no me gustan los viejos. Mis abuelos sí, pero creo que son los únicos, hay otros que me dan un poco de miedo.
Yo me senté en una mesita con mamá y otra gente. Papá saludó a muchos y mamá lo miraba. Todo el tiempo mi mamá miraba a mi papá. Él mucho no y cuando empezaron a leer se sentó en una mesa de más adelante y me arrepentí de no ir con él porque estaba cerca de dos nenes. En realidad una nena y un nene, creo que el nene era más grande pero más chiquito que yo y la nena era su hermanita y era más chiquita, toda linda, rubiecita, y muchos le hacían upa.
No me había imaginado que iban a ir otros chicos entonces le pregunté a mamá si me dejaba ir adelante con papá y me dijo que sí. Fui y estuve con ellos pero mucho no jugamos. Esos chicos eran los hijos de otro que leía, no del viejo, que era como un abuelo. Los chicos eran los hijos de un papá de edad normal. Es que no todos tienen papás de edad normal. Yo tengo amigas en la escuela que tienen papás mucho más grandes que mis papás y que el que leía en el domingo en el interpretador. Por eso lo digo.
Cuando leyó el viejo me aburrí un poco y me dio miedo al principio. Después se me pasó, pero él tenía una voz que no me gustaba, muy gruesa, muy de grande. Así que ahí me puse a jugar un poco con los otros chicos y mamá me trajo unas hojas y unos lápices para pintar.
El que era gracioso y todos lo aplaudían era el chico que presentaba a cada uno que leía. Ese me gustó. Y al papá de los chicos no le entendí mucho, pero mamá dice que es un poeta muy bueno. Después que leyó el papá de los chicos ellos se fueron con su mamá y yo empecé a aburrirme un poco más. Lo último que escuché fue una chica pelirroja re linda que leyó de una forma que también me dio un poco de miedo y que no pude entender si era un cuento para chicos o no, porque hablaba de chicos pero mucho no entendí lo que decía, además le pegaban a uno, lo ataban, no sé, me pareció divertido pero después pensé que si eso me lo hacen a mí no me gustaría. Al final, cuando iba a leer otro chico, mamá me vino a buscar adelante y me dijo que vayamos al kiosco a comprar una coca. Lo único que escuché fue la presentación y que iba a leer algo así como pornosonetos y mamá piensa que yo no sé pero sí sé y entendí que me sacó para que no escuche nada de lo que iba a leer ese chico porque era pornográfico.
Lo que no entendí es si ese lugar es el interpretador. ¿Será que los que escriben escriben ahí? Los diarios tienen un lugar. Eso me lo explicaron en la escuela. Pero el interpretador creo que no, porque mamá escribe en casa y manda por mail. Yo también. Y ese lugar parecía un bar, pero no era un bar común. Tiene un escenario chiquito y casi todo es de madera. Me parece que no es, pero estando ahí me dio la duda de si el interpretador es un lugar además de estar en internet.
Luly