el interpretador aguafuertes

 

Una cena en otra casa

Luly

 

 

 

 

 

Ya hace muchos días que mamá me dice que escriba algo para El interpretador porque hace mucho no escribo nada y entonces la gente se va a olvidar de mí. Yo le dije que no escribí en el último tiempo porque no se me ocurría qué decir y ella me dijo que a los escritores profesionales siempre se les tiene que ocurrir algo. Yo no supe qué decirle y entonces fui a mi cuarto y cuando estaba por dormir me acordé de que ella me pidió que escribiera algo la primera vez porque no se le ocurría nada. Así que me levanté y se lo dije y ella me abrazó y me dijo que por eso ella no es escritora profesional, porque nunca se le ocurre qué escribir.

Me fui otra vez a la cama y agarré el cuadernito para escribir algo. La semana pasada acompañé a mi papá a la presentación de un libro de un amigo de él y uno de los que hablaba tenía un cuaderno rojo tapa dura igual al que yo tengo. Me sorprendió porque los grandes no usan esos cuadernos. Yo siempre escribo en el cuaderno rojo y después lo leemos con mamá. Ella me ayuda con algunas cosas y cuando lo tenemos listo lo pasamos a la compu. Esto lo estoy escribiendo directo en la compu, ahora viene lo del cuaderno:

Hoy voy a hablar de otras nenas de mi edad. Hace como dos semanas fuimos a cenar a la casa de unos conocidos de mis papás que tienen dos nenas (yo había puesto amigos pero mamá me dijo que son conocidos porque son gente de trabajo y nada más). Fuimos a cenar a su casa porque mamá tenía que hablar unas cosas y me llevaron porque había nenas para jugar

Lara tiene mi edad, aunque ya cumplió diez y yo todavía no, igual las dos estamos en cuarto. Melisa tiene cinco años y es muy linda.

A mí me sorprendió mucho la casa de esa familia. Es re distinta a todas las casas que yo tuve. La decoración y todo lo que tienen nunca lo había visto así, todo junto y tanto. Por ejemplo, Lara tiene en su pieza una computadora, una tele con video y un equipo de música re chiquito. Había estantes de biblioteca como los que yo tengo, pero en vez de libros había juegos y películas. Yo no tengo todo eso. Siempre me enojo porque a mí no me dejan tener tele en el cuarto. A mis papás no les gusta que yo vea mucha tele y cuando voy a casas como la del otro día me da mucha envidia. Después mamá me dijo que no tengo que tener envidia, que son costumbres distintas y que yo en cambio tengo muchos libros en mi cuarto y que por eso soy mejor. Para mí todo eso es mentira y me lo dice para que me conforme. Con Lara nos pusimos a jugar y le pregunté dónde tenía los libros. Ella me dijo que no tenía libros, que no le gustaba leer. Eso también me pareció raro. A mí me gustaría tener una tele, pero libros también.

En la pieza de Melisa también había tele, video y equipo de música. Ella se fue a dormir más temprano, porque es chiquita. Puso una peli y se durmió con la peli. La mamá nos pidió que nos fijemos y que la apaguemos cuando ya estuviera dormida. A mí me causó gracia, porque había muchas teles, otra estaba en la pieza de los padres y otra, recontra grande, estaba en el comedor. La del comedor estaba buenísima. Le pregunté a mamá por qué nosotros no teníamos una tele así y ella volvió a decirme que la tele no es buena. Mi familia es re aburrida.

Lara es muy buena. Me quiso regalar como una estampita dorada con una virgen. Yo no sabía qué hacer, en mi casa no hay ninguna virgen, entonces le expliqué que no la podía aceptar porque soy judía. Se sorprendió y me preguntó en qué creían los judíos. Yo le dije que creo que creen en Dios pero que yo no sé si creo, porque me parece que en casa no creen en nada. Me miró raro y dijo que eso de no creer en nada es feo. Igual es buena, porque aunque no acepté el regalo no se enojó. Lara me contó que tomó la comunión y que reza casi todos los días. Yo me sentí un poco rara porque no sé cómo es rezar entonces no tuve nada para contar. Después le pregunté a papá en qué creemos los judíos y él me dijo que cada persona puede creer en lo que quiera, que no importa la religión que tenga, que la mayoría de los judíos cree en Dios. No entendí bien eso porque si los católicos creen en Dios y los judíos también, por qué somos tan distintos. Tampoco entiendo por qué Dios se escribe con mayúscula. Recién vino mamá y me lo corrigió, yo lo había puesto como un nombre común y ella me dijo que no es común, que es como Luly, se escribe con mayúscula.

Esto de la religión me parece muy complicado. Mamá siempre dice que somos judíos pero también dice que no somos religiosos, entonces me confunde. A mí me gusta como somos, sólo que a veces me cuesta explicarlo.


 

 

©Luly

 

 
 

el interpretador acerca del autor

 

 

               

Luly

"Me llamo Luly, tengo nueve años y estoy en cuarto grado. Soy de Bahia Blanca pero hace poco me mudé con mi familia a Buenos Aires. Vivo con mi papá que es fotógrafo, mi mamá que es periodista, mi hermano de 14, mi hermana que tiene 17 y es insoportable, y el Gato Combotas, así todo junto y con m, porque antes de la b larga va una m, es regla ortográfica."

Publicaciones en el interpretador:

Número 5: agosto 2004 - Vacaciones de invierno en Buenos Aires (aguafuertes)

Número 6: septiembre 2004 - Domingo en Giribone (aguafuertes)

   
   
   
   
   
 
 

Dirección y diseño: Juan Diego Incardona

Imágenes de ilustración:

Margen superior: Tadeusz Makowski, Czworo dzieci z traba (detalle).

Margen inferior: Adolphe Bouguereau, La tricoteuse (detalle).