Algunas voces:
“Inclusive desde el siglo XIX, y sobre todo desde la primera Guerra Mundial, los estadounidenses se sienten como una civilización aparte, con una especial misión en el mundo. Y esto lo confirma no sólo la presencia de figuras mundialmente decisivas en las letras, no sólo el haber sido uno de los países creadores del cine como arte y como industria, y el lugar de innumerables invenciones y perfeccionamientos técnicos; sino también su papel durante las dos Guerras Mundiales y después de ellas, así como sus actuales planes de ayuda a los países subdesarrollados de América y de otros continentes y su posición de principal baluarte del ´bloque de Occidente´ frente al ´bloque comunista”(1)
Preceptor – Enciclopedia Universal Ilustrada para la Juventud
“De las 500 grandes empresas que poseen el 73% del PBI mundial, el 85% están asentadas en EEUU, que cobija sólo el 4% de la población mundial y controla el 22% de la riqueza del planeta, si queremos mantener esta tajada de riqueza, precisamos venderle al otro 96% de la población mundial.”(2)
Bill Clinton
“Yo no entiendo por qué esto está pasándonos a nosotros, vos podés ver que nosotros somos simple buena gente. Nosotros amamos a nuestras familias, vamos a la iglesia, siempre damos dinero a los países pobres.. Yo simplemente no entiendo todo este aborrecimiento. Creo que hay por ahí mucha gente envidiosa alrededor del mundo”.(3)
Testimonio sobre la caída de las torres gemelas
De lo contencioso administrativo.
Casa de las Américas publica en 1963 El verdadero cuento del Tío Sam(4) de Ezequiel Martínez Estrada y Siné. La publicación original cuenta con los dibujos del caricaturista francés y los textos de Martínez Estrada en versión trilingüe: en español, inglés y francés.
El libro es una versión cargada de humor, a veces infantil, a veces negro, de la historia de Estados Unidos y su relación imperialista para con América Latina.
Desde la llegada de los Padres Peregrinos hasta los divertimentos de los nietos y sobrinos del Tío Sam, este cuento se cuenta en un contrapunto entre las caricaturas de Siné y la narración de Martínez Estrada, caricaturesca también.
Ahora bien, este caricaturismo, ya en el texto, ya en los propios dibujos, a qué viene, por qué se recurre a este tipo de textualidad en lugar de a ensayos críticos –en los que la experiencia de Martínez Estrada estaba ya más que demostrada-, o a una historia crítica de la formación de los Estados Unidos, de las necesidades de expansión de su capitalismo, etc.
Se intentarán analizar(5), entonces, en este trabajo las particularidades de la textualidad de este libro, el por qué de estas particularidades, el contexto en el que se inscribe y las potencialidades en el hoy de los procedimientos a los que recurre.
Acá empieza el trabajo.
“El libro (...) se trata de una historia infantil para ser contada a los adultos (...), ayudará a comprender verdades dichas entre risas.”(6)
Así, con un comentario de Lisandro Otero(7) , se invita a la lectura del libro desde su contratapa; con una caricatura de un belicoso, eufórico “Tío Sam” que agita dos bombas en sus manos y cuenta con una ridícula galera del color de la bandera, se invita de la mano de Siné desde la portada. Una historia infantil para ser contada a los adultos, con ese defasaje entre el tipo de composición textual y el receptor imaginado, con esa discordancia pide el libro ser leído. Veamos, ahora, en qué consiste ese desajuste.
El distanciamiento.
Desde el comienzo mismo de El verdadero... se ve la voluntad de distanciamiento: la primer frase, la única, relegada a un rincón en lo bajo de la hoja, es: “Aquí empieza el cuento”(8). Simétricamente, acabará: y este cuento se acabó.(9). Procedimiento sencillo, ingenuo casi, con algo de quijotesco y algo de cliché posmo, pero que se repetirá a lo largo de todo el libro, siendo, por hiperbolizado hasta rayar lo ridículo, productivo para el libro. Sigue el texto: “Hace muchos años, los Padres Peregrinos”(10) ; sigue haciendo uso de los clásicos comienzos de narraciones infantiles, pero para contar, en este caso, la historia -conflictivo, trágico tema para los latinoamericanos- de los EEUU: una historia infantil para ser contada a los adultos. Sea.
La historia que se cuenta necesita de este procedimiento para su propia conformación. Se pone en un lugar de lector infantil a un lector adulto y, sólo así, mediante la infantilización del texto, mezcla de fábula con grotesco, es que los mecanismos de dominio de EEUU para con los países de Latinoamérica pueden llegar a ser representados como (...) “un aparato ingenioso de control a distancia de lo que la tierra producía y el hombre hacía (que funciona) empleando insecticidas que extinguen las plagas del campo, como la garrapata, la sigatoka y la Reforma Agraria.”(11)
El humor –sutil a veces, chistes fáciles tantas otras- funciona, también, aquí como modo de distanciamiento. El lector, al caer en la propuesta risueña, será el encargado de completar ese hueco creado por el distanciamiento, será el que reponga los datos de la realidad de forma aún más activa que leyendo grandes ensayos críticos(12). El chiste fácil, entonces, funciona buscando que se restituya lo elidido, eso que hace que eso sea un chiste que genera risa.
“(...) les aconsejaron andar en las buenas compañías de la General Motors, la General Electric, la Standar Oil, la United Fruit, la Bond and Share y de otras muchas sociedades de beneficencia.(13)”
Toda la historia de las citadas compañías aparece así presupuesta y en contraste con el llamarlas sociedades de beneficencia, actualizándose y evidenciándose su historia de agentes de opresión y explotación. El imperio del banano de Kepner o Las venas abiertas de América Latina de Galeano, o la propia conciencia histórica del lector, aparecen como trasfondo necesario para este chiste fácil, trasfondo que ha de reponer el lector.
La sobre-identificación.
...no se pueden cambiar estas situaciones estancadas más que enfrentándose a ellas en sus propios términos(14)
Karl Marx
El libro en cuestión no plantea de una forma directa críticas a la ideología burguesa norteamericana o a los estragos acometidos por su ejército y por las empresas con capitales originarios en la gran democracia del norte, sino que plantea una narración haciendo uso de las categorías, conceptos y jerarquizaciones clásicas del liberalismo burgués para criticarlos poniendo en evidencia “las implicaciones que cada ideología conlleva, pero que aparentemente la contradicen”(15)
En la Enciclopedia Preceptor(16) , en la entrada correspondiente a Estados Unidos de Norteamérica, al lado del dibujo de un hombre vestido de armadura de soldado explorando La Florida, leemos: (...) “en Massachúsets, los Padres Peregrinos, sobre tierras arenosas, pobres, padeciendo penurias, echaron las bases de una gran nación: los Estados Unidos (...) su historia constituye una verdadera epopeya nacional.” (17)
En tanto, en el texto editado por Casa de las Américas se re-escribe: “Hace muchos años, los Padres Peregrinos llegaron al Norte de América con la Biblia en una mano y el fusil en la otra, para predicar a los indios la excelencia de la república, para arrasar con los demonios y las brujas y para fundar el Paraíso Terrenal”(18) . Haciendo uso de las propias categorías instauradas por el Tío Sam, llevándolas al extremo de lo ridículo, exacerbando sus propias posiciones, hiperbolizándola –eso que Martínez Estrada tan productivamente utilizara en algunos de sus cuentos- muestra lo falseable de la historia oficial.
En el manual de guerrilla de la comunicación se parte de la idea de que “una ideología consta siempre de dos partes: los valores ´explícitos´, declarados y propagados públicamente por un sistema político, y su ´cara oculta´(...) [y que] a pesar de ser generalmente conocidas, tales implicaciones son integradas por el hecho de quedar ´calladas´(19)” . En este sentido, los métodos de sobre-identificación se posicionan dentro de la lógica del orden dominante y la atacan haciendo que eso sabido pero callado no permanezca siendo tabú. Las propias contradicciones de la lógica dominante se hacen imposibles de ocultar al hiperbolizar su discurso.
La tergiversación.
Mediante la tergiversación de los discursos del poder es, a veces, más fácil mostrar y deconstruir abiertamente su función ideológica, muchas veces encubierta, que a través de textos analíticos bien elaborados.(20)
manual de guerrilla de la comunicación
Siguiendo con los procedimientos empleados en el libro, encontramos que, unida a la sobre-identificación y el distanciamiento, aparece la tergiversación de los grandes principios de la democracia burguesa, del capitalismo en expansión de EEUU y del puritanismo norteamericano.
Partiendo de los capitales principios supuestamente levantados por la democracia burguesa, igualdad y libertad(21) , Siné grafica(22) lo que podría ser una “postal” del EEUU esclavista: tres negros encadenados llevando en andas a un hombre blanco que lee un libro que en su tapa lleva la inscripción Libertad e Igualdad. Lo contradictorio de la imagen habla claramente de la realidad de explotación con la que EEUU forjó fortunas desde sus orígenes.
Martínez Estrada, en tanto, parte de este dato de la realidad para, dándolo por sabido, dar un paso más y no sólo denunciar la contradicción graficada por Siné entre discurso y realidad sino, tergiversando el enunciado Libertad e Igualdad, mostrar las contradicciones que se sostienen detrás de ese enunciado: “(...) proclamaron la libertad de todos los seres humanos blancos y la igualdad de todos los seres humanos negros”(23) . Se parte del discurso del poder y, no destruyéndolo sino desdoblándolo, se logra una crítica al mismo, dando por sabidos, tanto el llamado discurso del poder, como las contradicciones entre lo que dice y la realidad. El lector debe reponer estos supuestos asumiendo así, necesariamente, una posición crítica frente a tales.
En otra caricatura(24), Siné hace aparecer a la Estatua de la Libertad como una horca de la que el Tío Sam cuelga a un negro. La caricatura(25) , en la misma particularidad de su forma, cuenta con potencial crítico al tener la facilidad de cambiar el significado a lo caricaturizado, de hiperbolizar detalles, etc. Así, no sería tan productivo un dibujo en el que apareciera tachada la Estatua de la Libertad como lo puede ser éste en el que, manteniendo la posibilidad de reponer a ese símbolo supuestamente de la Libertad, se ve claramente la denuncia de su funcionalidad para con la explotación.
Martínez Estrada, por su lado, haciendo uso de los potenciales críticos de la caricatura, caricaturiza su texto y establece la relación entre el Tío Sam y las leyes, no diciendo que no las respeta ni que las leyes son leyes de legitimación de clase, sino que recurre a un chiste popular: “el viejo Sam jamás violó las leyes, particularmente las más fundamentales: la Ley del Pez, la Ley de Lynch y la Ley del Embudo”(26). Nuevamente, la caricaturización del texto es el elemento crítico.
Las propias categorías del discurso del Tío Sam son sometidas a la tergiversación: no se hace una crítica explícita al espíritu de empresa, o a las instituciones estadounidenses (o a los gobiernos latinoamericanos cómplices) sino que la crítica está mediada por el infantilismo caricaturesco y chistoso con que el texto trabaja sobre el discurso de la historia oficial: “el cacao, el petróleo, la diplomacia y la política económica estuvieron a cargo del Departamento de Estado, que tiene muchas filiales, como la Standar Oil, la United Fruit Company, etc.(27)” . Haciendo uso de valores del discurso liberal, se establece la crítica al funcionamiento empresarial del Estado norteamericano. No es criticando directamente el mercantilismo, sino mediante la ligazón de las empresas como filiales del Estado que se ejerce la crítica. Nuevamente, la reposición crítica queda del lado del lector que ha de reponer los datos de la realidad que posibilitan esa tergiversación (efectivamente, las empresas citadas funcionan como agentes de dominio norteamericano) y, también, el supuesto discurso del poder que supone separados al Estado de las empresas.
Todo texto en su contexto.
El verdadero cuento del Tío Sam, dijimos desde un comienzo, fue publicado en 1963 por Casa de las Américas(28), en La Habana, Cuba. Redunda decir que Cuba se encontraba en los primeros años de la revolución. Redunda comentar la estrecha relación existente entre Casa de las Américas y la revolución. Redunda observar que existe relación entre la revolución cubana y el libro de Siné & Martínez Estrada.
Los procedimientos analizados en el libro son, según la teoría de la guerrilla de la comunicación, correspondientes a lo que Michel de Certau denomina tácticas, es decir, prácticas que hacen uso del terreno del otro para actuar, “jugadas logradas, ardides elegantes, artimañas de caza, simulaciones múltiples, hallazgos, ocurrencias felices tanto de índole poética como guerrera(29)” . En correlato del concepto de tácticas, de Certau elabora el de estrategia, que sería el poder de dirigir las relaciones de fuerza y determinar y ocupar los espacios sociales, lo que presupone una institución provista de poder y un lugar social.
En la autobiografía de Siné que se incluye en el libro, leemos, en su último párrafo: “Ahora estoy en Cuba para aprender una gran lección de coraje y para tratar de comunicarla cuando vuelva a Francia.. .desgraciadamente sin mucha esperanza”(30). Nos encontramos en este breve párrafo con tres ejes esenciales para el análisis del libro: 3) la experiencia de Cuba, 2) la necesidad internacionalista de expandir la revolución y 1) las dificultades para comunicar un acontecimiento como la revolución a otro lugar.
“Se podría –se plantea el colectivo autor del manual de guerrilla...- objetar que justamente estas reutilizaciones tácticas son las pequeñas apropiaciones individuales y temporales que transforman el sistema, pero que, de este modo, también reproducen su estabilidad”(31). Sería, pensando en este sentido, ver al libro como un entretenimiento, a la cultura como 15´ de entretiempo en los que puede entretenerse leyendo algo gracioso como –hiperbolicemos el ejemplo- El verdadero cuento del Tío Sam.
Las tácticas son subversivas en tanto rompen las suturas con que se sostiene el discurso del poder, pero no llevan imperiosamente a cambios sociales radicales. “En este sentido –continúan pensando- las tácticas sólo serán efectivas cuando no se integren en las redes de estrategias como acciones aisladas, individuales y en gran parte inconscientes, sino que vayan asociadas a una estrategia consciente y colectiva, ´una estrategia de las tácticas´”(32) .
En este sentido, pensando las inquietudes planteadas por Siné a la luz de las reflexiones expuestas sobre estrategia y tácticas, podemos entrever que el libro, libro de tácticas –podríamos exagerar-, encuentra un soporte material estratégico en la triunfante revolución; es condición de necesidad para la lectura del libro la revolución como sostén del mismo. A su vez, para poder transmitir lo que el texto intenta transmitir es necesario recurrir a tácticas de la guerrilla de la comunicación más que a panfletos o folletos o, incluso, textos críticos de buen nivel sobre el imperialismo.
La necesidad de procedimientos tácticos –ese tergiversar el discurso del otro- se remontaría, entonces, a la necesidad de interferir el discurso hegemónico ya que, hacia el exterior de Cuba (sin mucha esperanza, decía Siné), se debe intervenir desde un no espacio, se interviene tácticamente, desde el terreno del otro, tergiversando su discurso.
Es en este sentido, en esa particular articulación que se da entre estrategia y táctica, entre el intervenir desde dentro de la revolución y hacia afuera, y volviendo sobre lo que manifestaba Siné sobre tratar de comunicar su experiencia cuando vuelva a Francia, que cobra especial sentido el hecho de que los textos de Martínez Estrada hayan sido publicados no sólo en castellano sino también en inglés y francés: se evidencia la voluntad de circulación que tenía el libro, era un libro desde la revolución y hacia afuera. Así, la experiencia de Cuba, la necesidad de internacionalizar la revolución y el contexto internacional en el que aún continuaba siendo hegemónico el capitalismo, son tres ejes que, al articularse, con sus evidentes tensiones, pueden ser leídos en El verdadero cuento del Tío Sam, libro de un intelectual argentino y un caricaturista francés que se encuentran en Cuba en los albores de la revolución.
Y este trabajo todavía no se acabó.
En contraposición a lo expuesto por David Viñas en su artículo sobre Martínez Estrada(33) del libro De Sarmiento a Dios, en este trabajo se intentó mostrar la productividad de ciertos enunciados de Martínez Estrada, ya por sus logros propios, complementados por Siné, ya por los modos de complementar a Siné. Sin embargo, aparte de varios logrados fragmentos, sería una falta no reconocer que, en algunos otros, lo eficaz se diluye, tanto en los textos como también en algunas caricaturas, siendo, de hecho, lo menos efectivo cuando no se complementan sino que se limitan tan sólo a representarse uno al otro.
No obstante, dado lo dicho desde el comienzo, y teniendo la ventaja de haber analizado en gran parte el texto a la luz de una teoría muy actual(34) , es posible encontrar en el libro herramientas que posibilitarían modos de intervención en la actualidad. Las tácticas de la resistencia a un sistema cuyas contradicciones se ven todos los días en cada esquina, en cada aula, pueden encontrar en este libro herramientas más que productivas para la intervención crítica, ya la tergiversación, ya usos del humor.
Sin embargo, aún cuando, desde ya, los métodos propuestos en el manual de guerrilla de la comunicación pueden ser útiles para ser tenidos en cuenta, examinados tras el trabajo con el texto analizado, se ve la diferencia sustancial según el espacio en el que se inscribe una táctica, se ven, se entreven, así, algunos de sus límites junto a sus potencialidades.
NOTAS
(1)Enciclopedia Universal Ilustrada para la Juventud Preceptor- Tomo 9: Estados Unidos. Buenos Aires, Ediciones Corcel, 1961, pág. 1060
(2)Citado en el boletín de la Asamblea de Caballito Gastón Riva. Nro7- sep./oct. 2003
(3) http://guillermomartinez.8m.net/ArticulosyEnsayos/statement.htm (en inglés originalmente, la traducción es mía)
(4)Trabajaré con la edición publicada por Editorial Schapire, 1973
(5)Se trabajará básicamente con los textos de Martínez Estrada, aunque es imposible separarlos totalmente de los dibujos crueles y muy certeros de Siné, con los que están en diálogo más productivo, a mi entender, que redundante.
(6)Martínez Estrada, Ezequiel & Siné: El verdadero cuento del Tío Sam. Bs. As. Schapire, 1973. Contratapa
(7)Este comentario es una extracción del prólogo que Otero escribiera a la edición original del libro bajo el título de La verdadera historia de este libro.
(8)Martínez Estrada, Ezequiel & Siné: op. cit. pág. 19
(9)ibidem. pág. 122
(10)ibidem. pág. 20
(11)ibidem. pág. 62/68
(12)Textos, obviamente, no por esto despreciables.
(13)Martínez Estrada, Ezequiel & Siné: op. cit. pág. 70
(14)Marx, Karl: Acerca de la crítica de la Filosofía del Derecho de Hegel, 1843-4. Citado en blissett, luther; a.f.r.i.ka.-grouppe y s. brünzels: Manual de guerrilla de la comunicación. Barcelona, Virus Editorial, 1998.. Pág. 80
(15)blissett, luther; a.f.r.i.ka.-grouppe y s. brünzels: op. cit Pág. 55
(16)Se seguirá la versión que se da en esta enciclopedia como un ejemplo de “historia oficial” al creerla pertinente sobre todo por ser la fecha de edición (1962) similar a la del libro de Estrada y Siné. De crucial importancia es tener en cuenta la historia oficial ya que, se intentará mostrar, el libro trabaja constantemente con ella como material.
(17)Enciclopedia Universal Ilustrada para la Juventud Preceptor- Tomo 9: Estados Unidos. Buenos Aires, Ediciones Corcel, 1961, pág. 1048
(18)Martínez Estrada, Ezequiel & Siné: op. cit, pág. 20
(19)blissett, luther; a.f.r.i.ka.-grouppe y s. brünzels: Manual de guerrilla de la comunicación. Barcelona, Virus Editorial, 1998. Pág. 54/55
(20)ibidem. pág 88
(21)Vale aquí reponer un párrafo de la Enciclopedia Preceptor: “Las universidades son en su mayoría privadas; y ello es muestra de otro rasgo típico: el principio liberal de la libre competencia entre individuos y grupos, procurando dar a todos igualdad de oportunidades para que triunfe el más capaz” op. cit. pág 1058
(22)Martínez Estrada, Ezequiel & Siné: op. cit, pág. 27 (ver apéndice I)
(23)ibidem. pág. 26
(24)ibidem. pág. 75 (ver apéndice II)
(25)Es interesante ver el uso que se le dio a la caricatura en la película de Michael Moore, Bowling for Columbine (Estados Unidos- Alemania, 2002). Los caricaturistas y guionistas de South Park hicieron una historia de los Estados Unidos de una duración de tan sólo 3 minutos, haciendo uso del humor, de una narración guiada por una bala y de una importante aceleración narrativa para mostrar el uso de armas a lo largo de la conformación del país.
(26)Martínez Estrada, Ezequiel & Siné: op. cit, pág. 74
(27)ibidem. pág. 36
(28)Entidad que, hasta la actualidad, da por nombre a su concurso de ensayos Concurso de Ensayos Ezequiel Martínez Estrada (http://www.casa.cult.cu/ )
(29) De Certau, Michel: Arts de faire. Paris, 1990. Citado en blissett, luther; a.f.r.i.ka.-grouppe y s. brünzels: Manual de guerrilla de la comunicación. Barcelona, Virus Editorial, 1998. Pág. 30/31
(30)Martínez Estrada, Ezequiel & Siné: op. cit, pág. 18
(31)en blissett, luther; a.f.r.i.ka.-grouppe y s. brünzels: op.cit. Pág. 31
(32)ibidem. Pág. 31
(33)Viñas, David: Martínez Estrada, del New Deal al Che Guevara, en De Sarmiento a Dios., Buenos Aires, Ed. Sudamericana, 1998, págs. 288-294
(34)Podría pensarse, más bien, que el propio potencial crítico del libro es el que permite su lectura a la luz de la teoría de la guerrilla de la comunicación.
Bibliografía:
§ blissett, luther; a.f.r.i.ka.-grouppe y s. brünzels: Manual de guerrilla de la comunicación. Barcelona, Virus Editorial, 1998
§ Dorfman, Ariel: Los sueños nucleares de Reagan. Buenos Aires, Editorial Legasa, 1986
§ Enciclopedia Universal Ilustrada para la Juventud Preceptor- Tomo 9: Estados Unidos. Buenos Aires, Ediciones Corcel, 1961
§ Kepner, Charles: El imperio del banano, Buenos Aires, Instituto de Estudios Latinoamericanos, Centro de Derecho y Cs. Sociales (FUBA), 1957.
§ Martí, José: Argentina y la primera conferencia panamericana. Buenos Aires, Ediciones Transición, 1955
§ Martínez Estrada, Ezequiel y Siné: El verdadero cuento del Tío Sam. Buenos Aires Ed. Schapire, , 1973
§ Pla, Alberto J. (antología, prólogo y notas): América Latina y Estados Unidos- De Monroe a Jonson. Buenos Aires, Centro Editor de América Latina
§ Rinesi, Eduardo: Política y tragedia. Hamlet, entre Hobbes y Maquiavelo. Buenos Aires, Ed. Colihue, 2003
§ Viñas, David: “La historia excluida: ubicación de Martínez Estrada”, en Contorno-Selección. Colección Capítulo Nro 122, Buenos Aires, Centro Editor de América Latina, 1981. Pág 30-48
§ Viñas, David: “Profecía, heterodoxia y progresismo: Martínez Estrada" en Literatura argentina y realidad política. De Sarmiento a Cortázar. Buenos Aires: Ediciones Siglo Veinte, 1974, págs. 92-103
§ Viñas, David: “Martínez Estrada, del New Deal al Che Guevara" en De Sarmiento a Dios-Viajeros argentinos a USA. Buenos Aires: Editorial Sudamericana, 1998, págs. 288-296