Gustavo Lespada - 4 Poemas pertenecientes al libro Naufragio

 

 

FANTASMA


creerás verme cuando la costra 
friegues de tu vida cotidiana, ojo
al bajar la guardia que atrás vengo
sólo el espacio blanco me contiene
sólo ahí permanezco
instalado en vacíos que preservas
debajo del diafragma del anhelo
allí donde no llega la palabra
acuñado en ausencia he de habitar
el eco, he de poblar las grietas
parasitario
en cada hueco de silencio que repte entre él y tú

yaceré agazapado
en la orilla desierta de una queja
me tenderé a los pies de una impotencia
cavaré mi guarida entre tu ropa
desmayada en la silla o en la cama
y rugiré a tu espalda enredándote
el pelo con aullidos con baba
de famélicas jaurías en esas
noches de lluvia cuando
el trueno te recorra
las sábanas




 

COMO PIEDRAS

tal vez ni fuera pino / tal vez la piedra tenga
millones de años y / sólo mude de forma
en la fricción o cuándo / en qué momento
comienza a deshilarse / lo que era
trama apretada / nudo / lo que era amar
ahora parecen piedras / que un tren a mar
del plata / piedras que pulió el agua / dejas la huella dura
tiras el pie a los bichos / sólo cuervos te salen a mis ojos
sólo herrumbre mastica los recuerdos / piedras como
moviéndose en un tarro / cebando ayer plurales
mañanas que hoy no dejas amanecer / una
minucia leve / la sombra de mis manos
en la sombra de tu cintura / semejando
la sombra de una piedra / una mesa
de pino (se sabe la madera puede
petrificarse en ciertas
condiciones cierto
paso del tiempo)
poca cosa

 

MIEDOS

hay miedos
que dejan en la calle
desalojan
te cubren de intemperie
es el miedo a perdernos que
nos pierde
miedo a no seguir
juntos / a quedar rezagado
pero a pesar del miedo sé que sos
lo que quiero saber de mí

 

EL PALO

la mano toma el palo para parar el golpe
(el primer golpe siempre / es extranjero)
un mástil sin bajel erige amenazante
al prolongar el brazo endurecido
el tendón enmadera
su rigidez en alto


luego cuando la lágrima o el beso
luego cuando otras manos abren
luego cuando le dan el cielo
la mano / aunque no quiera
sigue esgrimiendo
el palo


qué lluvia ablanda el palo / qué sol revienta
en la corteza el brote / o qué médula fuera
capaz de socavar el hueso / cómo plantar
el verde / de un árbol con tenazas
cómo ha de abrirse paso la caricia
entre la soldadura de los dedos
enarbolados


o se transforme en remo
y la madera dance cantarina
cuando la mano apriete levantando
el palo con su pala ahuecada / su cadera
lustrosa que se hunda / brillante blandamente
empujando y avance
sobre el agua




©Gustavo Lespada

 
el interpretador acerca del autor
 
         

Gustavo Lespada

Gustavo Lespada, licenciado en Letras (UBA), es autor de Esa promiscua escritura (2002) e Hilo de Ariadna (1999), de diversos artículos y ensayos críticos publicados en libros y revistas especializadas nacionales y extranjeras, además de haber coeditado una antología de textos críticos de Noé Jitrik, Suspender toda certeza (1997). En diciembre de 2003 obtuvo el premio Juan Rulfo (categoría ensayo literario) en el concurso de Radio Francia Internacional – Colección Archivos UNESCO, y en 1997 el 2° premio de la Academia Nacional de Letras del Uruguay en el concurso en Homenaje a Felisberto Hernández. Desde hace doce años ejerce la docencia y la investigación sobre literatura latinoamericana en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires.

 

Publicaciones en el interpretador:

Número 6: septiembre 2004 - Poemas

           
 
 
 
 
     
   
 
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